Antiguamente, cuando el propietario de la típica tienda quería conocer si la competencia le quitaba clientes, iba directamente hacia el otro establecimiento y observaba desde la distancia. Las conclusiones que podía sacar eran más o menos fiables. En el mundo empresarial, sobretodo en las pymes, la búsqueda de la correcta información forma parte del núcleo en el que se tendrán que sustentar la mayoría de acciones futuras. Ya no se trata de ir a observar a la empresa vecina, sino más bien realizar un análisis exhaustivo para que la toma de decisiones esté correctamente respaldada. La metodología más eficaz responde a la recopilación de información útil para la compañía.
Para ello, se realiza un símil con una ave rapaz. En un inicio, el ave observa desde mucha distancia todo el terreno. Si dispone de gran vista se lanzará directamente sobre la zona en la que cree que habrá más presas, por el contrario, si su visión no es del todo eficiente, observará con más detenimiento. A medida que se acerca al suelo, donde habitan la mayoría de presas, aumentará la concentración visual y preparará todo su cuerpo para realizar el descenso. Una vez localizadas las presas que exactamente deseaba, la distancia hacia ellas se realiza de manera directa y constante, hasta alcanzar su preciado objetivo.
Bajo este símil, y obviamente teniendo en cuenta todos aquellos factores que pueden influir y no han sido comentados, las pymes pueden empezar a realizar un completo análisis informativo, empezando a nivel global para terminar exactamente con el nicho en el que opera la compañía.
Las Amenazas y Oportunidades del DAFO nacen de este estudio del mercado en general. La situación de la economía, los frenos legales, los indicadores sociales y de población, etc., son indicadores a tener en cuenta ya que en un mundo global, existen muchos aspectos que pueden influir en la propia organización.
Con los datos anteriores, los profesionales deberían acercarse más al análisis del sector. Las cifras de ventas de todo el sector y la evolución de las mismas también deberían ser tratadas. Finalmente, el nicho en el que la empresa opera, la información más relevante a tener en cuenta es el control de los competidores. Identificarlos resulta una complicada tarea, ya que los que realmente interesan son los que se dedican en mayor o menor medida a la misma actividad económica, comparten similitudes en el tamaño de la empresa y coinciden en las operaciones de venta. La consecución de todos los datos económicos relevantes de la competencia, mostrará indicadores como la cuota de mercado basada en el nivel de ventas del sector, por ejemplo.
Cabe añadir que cuando en el nicho de mercado aparece una multinacional, las pymes no tratan a este tipo de empresas como competidores sino como competencia, ya que por norma general, los competidores puede arrebatar clientes, pero la competencia, aunque se sitúe en el mismo sector, se dirige a otro tipo de clientes más acordes con su dimensión.
Con toda la información anterior recopilada, empieza una de las fases más importantes, el tratamiento de la misma. La homogenización de los datos obtenidos es fundamental para las comparativas, juntamente con dotar del valor correspondiente a cada campo estudiado.
Aumentar de valor la toma de decisiones tendrá como consecuencia una correcta dirección en las futuras acciones de la compañía. Todos los datos conseguidos serán claves para empezar a trabajar las debilidades de la empresa, juntamente con la maximización de las fortalezas. La información es poder, y junto con ello, las futuras estrategias derivadas de una acertada toma de decisiones.