Info Malthus Darwin

marzo 14th, 2008 a las 5:37 pm

EL PRECIO DE TENER A UNA ESTRELLA PUBLICITARIA

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Recurrir a una estrella mediática para la promoción de una marca, producto o servicio es una técnica que empieza a normalizarse entre las distintas organizaciones. Salvando el primer gran obstáculo como es el coste inicial invertido, las empresas han obtenido grandes resultados gracias a campañas realizadas por líderes de opinión, actores o deportistas que se convirtieron en prescriptores de lujo.

Los motivos por los que se utiliza a un rostro popular son debidos a la identificación de los potenciales consumidores con el producto o servicio a publicitar. Basándonos en una correcta utilización de las variables, la mayoría de casos ejercen una influencia determinante a la hora de convencer en la decisión de compra o en la apreciación de la marca. Además, para el consumidor representa un reconocimiento y estima transmitidos hacia el producto anunciado, siendo a partir de su compra nuevos prescriptores.

Añadir un rostro conocido en una campaña publicitaria representa un coste elevado para la mayoría de organizaciones, por este motivo el acceso a este tipo de campañas publicitarias parece estar reservado exclusivamente grandes multinacionales, con suficiente poder económico y de negociación como para hacer frente a esta inversión publicitaria. El estado de notoriedad de la estrella representa un indicativo hacia el retorno de la inversión, junto a ello, el interés despertado por el producto o servicio anunciado generará el éxito deseado en la promoción publicitaria.

En un entorno claramente competitivo, arrancar de los consumidores alguna mención hacia una campaña publicitaria puede representar a priori un éxito, aunque no se realice la compra a muy corto plazo. Esto es debido a que puede recordar más fácilmente el producto o servicio gracias a la estrella publicitaria, más notoria en la mente de ellos por su identidad, cercanía e autenticidad.

Utilizar estrellas mediáticas para la promoción de un producto o servicio tiene también algunos aspectos negativos, tanto para la empresa como para la celebridad. Para la empresa, puede llegar a no cruzar correctamente los valores que representa la estrella junto con los de sus consumidores, creando así una discordancia nada beneficiosa. Por otra parte, para la celebridad, dependiendo del producto, servicio o marca a promocionar, puede generar un desprestigio que puede frenar su propia carrera. Por lo que como toda campaña de marketing y publicidad, en estos casos no solo se trata de juntar un personaje famoso más un producto o servicio.

Fuente: www.cincodias.com